Una parte importante de la gestión de contenidos es gestionar y tratar las imágenes y los archivos multimedia.
No se necesita ser un diseñador gráfico, ni experto en fotografía, pero sí se necesitan un mínimo de base para cubrir las necesidades gráficas de los artículos.
Además de definir unos patrones de estilo en imagen corporativa, la creatividad e imaginación del editor son un punto a favor para comunicar mensaje e información con la imagen resultante (banner, carteles,...).